KGHM, en la etapa preliminar de preparación de la inversión relacionada, por ejemplo, con la determinación de la localización de la SMR, ha identificado varios lugares en el territorio de los voivodatos de: la Baja Silesia, Opole, Lubusz y la Gran Polonia. En la decisión básica obtenida, emitida por el Ministerio del Clima y el Medio Ambiente, aparecían dos municipios del voivodato de la Gran Polonia (Lubasz y Wieleń), pero esto no decide de antemano la realización de la inversión precisamente allí.
DIÁLOGO Y ESTUDIOS
La decisión básica emitida a favor de la sociedad solo permite iniciar las acciones que tienen como objetivo preparar el proceso de inversión y construcción en el territorio de los dos municipios indicados, aunque no limita la posibilidad de que el inversor solicite un cambio de la decisión ya emitida o solicite una nueva decisión básica para otros potenciales lugares identificados por el inversor.
Merece la pena destacar que la confirmación de la localización de una central nuclear es un proceso de varias etapas, dentro del cual el inversor tiene la obligación de obtener, además de la decisión básica, también: una decisión medioambiental, una decisión sobre localización, una licencia de obra, un permiso de obra, un permiso para la puesta en funcionamiento y un permiso de explotación. El inversor debe llevar a cabo estudios detallados de localización y medioambientales en las potenciales localizaciones. En esta etapa KGHM planea realizar una campaña informativa y educativa, así como poner en marcha procesos para escuchar la voz de las comunidades locales. La empresa está en contacto con las autoridades de los municipios de las localizaciones con unas mayores perspectivas para esta inversión.
La colaboración con las administraciones locales en el marco de la mencionada campaña tendrá como objetivo la divulgación de conocimientos en el campo de la energía nuclear, el diálogo con los habitantes, el apoyo a la realización de iniciativas sociales locales y la creación de una aceptación local para la inversión planificada. En este ámbito KGHM planea seguir las buenas prácticas relacionadas con la implantación del Programa de Energía Nuclear Polaca.
PASO A PASO
Antes de tomar la decisión definitiva son necesarias otras actuaciones, que tienen como objetivo comprobar la potencial influencia de la central eléctrica sobre el medio ambiente (los denominados estudios de impacto ambiental) y los posibles peligros externos para la central eléctrica en dicho terreno (estudios de localización). Los estudios de impacto ambiental van precedidos de la preparación por parte del inversor de la Ficha Informativa del Proyecto (FIP), en la que serán determinadas las variantes exactas de localización de la inversión planificada en el territorio de los municipios. Se estima que la FIP estará lista no antes del tercer trimestre del año 2024. La realización de todos los estudios y controles requeridos dura 2-3 años y finaliza con la preparación por el inversor del Informe de impacto ambiental del proyecto y el Informe de Localización. El Informe de impacto ambiental es a continuación objeto de consultas públicas y consultas internacionales y está sujeto a la verificación de la Dirección General de Protección del Medio Ambiente. El Informe de Localización es adjuntado a la solicitud de permiso de obra.
La decisión básica es la primera decisión en el sistema de permisos administrativos para inversiones en instalaciones de energía nuclear en Polonia que debe solicitar un inversor. El último permiso administrativo cuya obtención se requiere al inversor en este sistema es la decisión sobre el permiso de explotación de una instalación de energía nuclear.
SEGURIDAD Y FUTURO
KGHM se dedica a la extracción y la transformación de valiosas materias primas naturales. El principal producto de KGHM es el cobre, pero la empresa también extrae y procesa metales nobles, plata y oro, y otros, como molibdeno, plomo y selenio. La sociedad también tiene plantas de producción en América del Norte y del Sur. Los recursos mundiales de mena de cobre controlados por KGHM - 40 millones de toneladas - garantizan a la empresa el título de líder de la industria extractiva.
La extracción y el procesamiento de los metales requieren una enorme cantidad de energía. KGHM, con el fin de minimizar el impacto de su actividad sobre el medio ambiente, ha adoptado una ambiciosa Política Climática, que establece la consecución de la neutralidad climática antes del año 2050. Una de las estrategias que harán posible el cumplimento de este objetivo es la construcción de fuentes propias de producción de energía eléctrica de bajas emisiones. La garantía de suministros de energía continuos y seguros solo de fuentes renovables, como aerogeneradores o paneles solares, no sería posible. Por ese motivo también se ha considerado en los planes de desarrollo de KGHM la implantación de la energía nuclear y más exactamente de reactores modulares pequeños, SMR (small modular reactor).
SMR es una tecnología prometedora, desarrollada desde hace años en todo el mundo, con una serie de ventajas en relación con los grandes reactores nucleares, entre ellas: un tiempo de construcción más corto, la posibilidad de producción de módulos, es decir, de los diferentes reactores nucleares en una fábrica y su suministro al lugar de explotación utilizando el transporte ferroviario o marítimo, la seguridad basada en sistemas pasivos, que garantiza un apagado seguro del reactor en caso de avería, sin injerencia del operador, la disponibilidad de alimentación eléctrica o el suministro de emergencia de agua de refrigeración, una zona de seguridad muy pequeña con un radio de varios centenares de metros, lo que significa la ausencia de influencia de la central eléctrica en las edificaciones próximas.
KGHM estudia proyectos SMR basados en una tecnología de agua ligera y, por lo tanto, la mejor comprobada en la explotación de grandes reactores nucleares hasta el momento. Se tienen en consideración proyectos desarrollados principalmente por entidades de Gran Bretaña, Francia y los Estados Unidos. KGHM pretende seleccionar la mejor tecnología de reactor para su proyecto SMR (desde el punto de vista económico, medioambiental y de la seguridad) de conformidad con los mejores estándares mundiales y respetando los principios de transparencia y competitividad.